Un hueco para ti

Quiero que sepas, que haré mi vida.
Haré mi vida y tú no estarás en ella. Estaremos lejos y puede que ni nos volvamos a ver.

Pero quiero que sepas algo: en mi vida siempre habrá un pequeño hueco para ti.
Quizá sea solo un recuerdo que aparece cuando paso por ese bar del barrio, o quizá tenga un hueco en mi apretada agenda para tomar un café contigo y recordar lo tontos que fuimos.

Y es que fuiste parte de mi vida, un capítulo de mi libro, al fin y al cabo igual de importante que los demás.

No importa lo bien o mal que lo pasase, no importa si alguna vez lloré. Gracias.

Porque de todo se aprende, y si me diesen la opción de volver al pasado y cambiarlo todo, no lo haría.

De lo malo he aprendido, y con lo bueno me quedo para sonreír de vez en cuando. Porque hubo un tiempo en el que me hiciste feliz, y aunque fuese poco tiempo, gracias. Gracias por completar un capítulo, gracias por ser como fuiste en ese momento, y gracias por aparecer cuando más lo necesitaba aunque después te fueses.

No importa. Apareciste y me salvaste de la monotonía. Unas horas, días, meses… ¿qué más da? Al fin y al cabo estaba pérdida y encontré algo mejor.

No quiero oír de tu boca que hubiese estado mejor sin ti.

Porque no es verdad. Porque me hiciste vivir, porque aunque ese capítulo lo leyese hace mucho tiempo, sin él este libro estaría incompleto.

Pase el tiempo que pase, recuerda siempre que te quiero.

Un comentario sobre “Un hueco para ti

Deja un comentario